10 aspectos esenciales de los acuerdos entre china y el vaticano

La Asociación Patriótica Católica China y los Acuerdos Secretos con el Vaticano

10 aspectos esenciales para los católicos

En este breve artículo pretendo exponer los elementos fundamentales que todo católico debería conocer sobre la Asociación Patriótica Católica China (APCC) y los acuerdos secretos entre la Santa Sede y la República Popular China. A través de una revisión de fuentes académicas y eclesiásticas, se presentan diez aspectos claves que permiten comprender la complejidad de las relaciones entre el Vaticano y el régimen comunista chino, especialmente en el contexto de la libertad religiosa y la autoridad eclesial.

1. Origen de la Asociación Patriótica Católica China (APCC)

La APCC fue establecida en 1957 por el gobierno comunista chino para supervisar y controlar las actividades de la Iglesia Católica en China, separándola de la autoridad del Papa. Su objetivo declarado era crear una Iglesia «independiente, autónoma y autogobernada», en línea con la política del Estado. Esto ha generado una división entre católicos “oficiales” (reconocidos por el régimen comunista) y “rebeldes” (fieles a la Roma eterna). Así informa Bitter Winter: “(APCC, Asociación Patriótica Católica, 中國天主教愛國會). La misma forma parte del mercado rojo, fue establecida en el año 1957 por católicos leales al Partido Comunista Chino (PCCh) como una Iglesia católica controlada por el Gobierno e independiente del Vaticano, quien rápidamente excomulgó a sus líderes y la declaró cismática. Tras el Acuerdo entre el Vaticano y China del 2018, el Vaticano comenzó a considerar la APCC y a la Iglesia Católica Clandestina como una única Iglesia Católica China. Las directrices del Vaticano para el año 2019 les permiten a los obispos y sacerdotes católicos unirse a la APCC, si es necesario, expresando oralmente o por escrito sus reservas sobre la redacción de las declaraciones que, no obstante, pueden firmar al unirse. Por otra parte, las mismas directrices les piden «respeto» a los objetores de conciencia católicos que se niegan a unirse a la APCC.”[1]

2. División de la Iglesia Católica en China

El control estatal provocó una fractura en la comunidad católica: una parte siguió las estructuras oficiales bajo la APCC, mientras otra se mantuvo en la clandestinidad, fiel al magisterio romano que condena el comunismo y se ordena a la Tradición. Esta división ha perdurado durante décadas, y es fuente de tensión y persecución. Se ve como ejemplo la noticia que trascendió los últimos día, la cual sostiene: “El 23 de marzo, un hombre resultó gravemente herido en la cabeza durante un enfrentamiento con la policía en una parroquia de la diócesis de Lüliang, en la provincia china de Shanxi. Fue ingresado en coma en la unidad de cuidados intensivos del hospital local. Este feligrés se llama Francesco Zuo Shangwangi y vive en la aldea de Xinli, en el condado de Wenshui.[2]

3. El conflicto de autoridad eclesial

Uno de los puntos más conflictivos ha sido la designación de obispos. Según la doctrina católica, sólo el Papa tiene autoridad para nombrar obispos (Catecismo de la Iglesia Católica, n. 882), pero la APCC ha nombrado obispos sin el consentimiento del Papa, violando este principio central del derecho canónico (Code of Canon Law, can. 377 §1). Así es como AciPrensa presenta este suceso, al decir: “Mientras la Iglesia Católica atraviesa un período de sede vacante, las autoridades chinas han tomado medidas para afirmar la autonomía de la Iglesia en China respecto a Roma mediante la «elección» unilateral de dos obispos, incluso en una diócesis ya dirigida por un obispo designado por el Vaticano.[3]

4. La política religiosa del Partido Comunista Chino

El Partido Comunista busca que todas las religiones se sometan al control del Estado y contribuyan a los objetivos socialistas. El cristianismo es visto con sospecha por su origen extranjero y su potencial para crear estructuras independientes de poder (Kindopp & Hamrin, God and Caesar in China: Policy Implications of Church-State Tensions, 2004). Es interesante ver las investigaciones de Puertas Abiertas que bien exponen que “las iglesias no registradas, incluso las que antes se toleraban, se consideran ilegales y están sometidas a una presión cada vez mayor, ya que las autoridades intentan hacer cumplir la normativa del PCC y endurecer las políticas sobre libertad religiosa. Las iglesias aprobadas por el Estado están sometidas a una fuerte presión ideológica, y las congregaciones más pequeñas a menudo se ven obligadas a fusionarse para formar una iglesia más grande, más fácil de controlar por el Estado.[4]

5. El acuerdo secreto China-Vaticano de 2018

En 2018, el Vaticano y China firmaron un acuerdo provisional, renovado en 2020 y 2022, cuyo contenido exacto permanece confidencial. Según fuentes vaticanas, el acuerdo trata sobre el nombramiento conjunto de obispos, intentando sanar la división eclesial y asegurar la unidad eclesiástica (Vatican News, 2018). Sin embargo, la falta de transparencia ha generado críticas dentro y fuera de la Iglesia. Aquí resalta lo que se expuso oportunamente en Religión en Libertad: “El acuerdo, renovable cada dos años y vigente hasta el 22 de octubre, se renovará en breve, según anunció hace ya meses el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado vaticano. El texto sigue siendo secreto. Según la Santa Sede, «concierne exclusivamente al nombramiento de obispos» y no afecta «directamente» ni a las relaciones diplomáticas bilaterales, ni al estatus legal de la Iglesia en China, ni a las relaciones entre el clero y las autoridades. Solo implica un compromiso de consenso para el nombramiento de obispos. Compromiso que ya en sí es toda una anomalía. Después del Concilio Vaticano II, el Vaticano presionó para acabar con los pocos «derechos de presentación» de obispos que quedaban en países católicos (España entre ellos) como expresión histórica de su fe, y que pasaron a ser rechazados como intrusión intolerable de las autoridades en la libertad de la Iglesia. Sesenta años después el propio Vaticano ha otorgado algo similar (exactamente qué… no se sabe) a una de las organizaciones más brutalmente anticatólicas de la historia.[5]

6. Críticas al acuerdo dentro de la Iglesia

Varias figuras católicas han cuestionado el acuerdo. El cardenal Joseph Zen, obispo emérito de Hong Kong, lo calificó como una «traición» a la Iglesia clandestina, afirmando que legitima al régimen comunista y abandona a los católicos perseguidos (Zen, 2019). La falta de mejoras visibles en la libertad religiosa ha alimentado estas críticas. Hasta BBC se hizo eco cuando publica estas palabras “En los últimos años, el gobierno chino elevó los controles sobre las comunidades religiosas y emprendió controvertidas campañas en algunas zonas del país, que incluyeron la retirada de cruces de templos y arrestos a obispos de la iglesia clandestina, según denunciaron organizaciones en defensa de los derechos humanos. Esa situación hizo que no todos recibieran con entusiasmo este nuevo acercamiento entre el Vaticano y Pekín. Entre ellos se encuentra el cardenal Joseph Zen, arzobispo emérito de Hong Kong, que ha pasado gran parte de su carrera ayudando a los católicos en «el punto de mira» del régimen comunista. Zen, que llegó a tildar de «traición» un posible acuerdo de este tipo, criticó la falta de transparencia de la Santa Sede y China y que calificaran su firma de «provisional».»¿Cuál es el mensaje que este comunicado envía a los creyentes en China? (…) Con el acuerdo, el gobierno puede decir a los católicos: ‘¡Obedézcanme! ¡Estamos en acuerdo con su Papa! (?)», señala el cardenal en una publicación de Facebook. A principios de este año, un grupo influyente de católicos publicó una carta abierta con sus preocupaciones sobre la nueva relación entre el Vaticano y Pekín, en la que advertía al Papa de que el «Partido Comunista tiene una largo historial de promesas rotas»»La persecución religiosa nunca ha parado. (El presidente chino) Xi ha dejado claro que el Partido reforzará su control sobre las religiones».[6]

7. Persecución y control continuo de los católicos

Pese al acuerdo, los reportes de represión continúan. Iglesias son demolidas, cruces retiradas y sacerdotes clandestinos son detenidos o forzados a registrarse ante el Estado (U.S. Commission on International Religious Freedom, 2021). La política de “sinización” obliga a adaptar los mensajes religiosos a la ideología del Partido. Véase lo que claramente se expone en Política-China.org: “El maoísmo tiene en la sinización del marxismo un epítome esencial. Al invocar la necesidad de corresponder a la realidad del país, Mao sugería que debe tener en cuenta las peculiaridades propias de China. El líder chino insistía en la necesidad de partir de la realidad de China para acertar en la agenda y en las políticas y basó de forma irreversible su liderazgo interno en dichas coordenadas frente a quienes postulaban cierto seguimiento dogmático y ciego de las orientaciones de matriz ajena. En gran medida, la defenestración de Wang Ming y los “28 bolcheviques” escenificaba ese punto y aparte. La “línea marxista correcta” fue establecida en la reunión de Zunyi (1935), y su fundamento exigía otorgar prioridad a las características singulares de la revolución china. El VII Congreso (1945) celebrado en Yan´an precisó a quien cabe decidir cuáles de los principios del comunismo clásico internacional son aplicables a China. La adaptación del marxismo al contexto chino se erigió en garantía de triunfo de la revolución. El “buscar la verdad en los hechos”, establecido como “un punto de vista fundamental del marxismo y una exigencia fundamental a los comunistas chinos para conocer y transformar el mundo” (Xi, 2014: 31) se completó con todo un catálogo de prácticas políticas de ascendencia original, desde la línea de masas (de las masas a las masas) a la crítica-autocrítica o las sucesivas campañas de rectificación, de fuerte ascendencia cultural. Sin embargo, el maoísmo, abiertamente anticonfuciano, hostigó algunas de las vigas estructurales de la cultura china.[7]

8. El dilema moral de la cooperación con regímenes autoritarios

El acuerdo plantea un debate ético: ¿Puede la Iglesia colaborar con un régimen que restringe derechos humanos para proteger a sus fieles? Aquí el católico entra en conflicto si se recuerda que el comunismo ya ha sido condenado por la Iglesia. La Carta Encíclica Divini Redemptoris del Sumo Pontífice PÍO XI sobre el comunismo ateo reza: “Procurad, venerables hermanos, con sumo cuidado que los fieles no se dejen engañar. El comunismo es intrínsecamente malo, y no se puede admitir que colaboren con el comunismo, en terreno alguno, los que quieren salvar de la ruina la civilización cristiana. Y si algunos, inducidos al error, cooperasen al establecimiento del comunismo en sus propios países, serán los primeros en pagar el castigo de su error; y cuanto más antigua y luminosa es la civilización creada por el cristianismo en las naciones en que el comunismo logre penetrar, tanto mayor será la devastación que en ellas ejercerá el odio del ateísmo comunista.[8]

9. La unidad eclesial como objetivo del Vaticano

A pesar de las críticas, la Santa Sede sostiene que su intención es lograr la unidad plena de los católicos en China y garantizar la sucesión apostólica legítima (Vatican News, 2020). El acuerdo se interpreta como un paso pastoral hacia esa reconciliación, aunque no exento de riesgos. De hecho, Vatican News informaba con optimismo al sostener que “…El Vaticano reafirma su intención de mantener un «diálogo respetuoso y constructivo con la parte china»… Se trata de la tercera renovación de un acuerdo que, con su firma el 22 de septiembre de 2018, había abierto una página histórica en las relaciones entre la Santa Sede y la República Popular China, y dentro de la propia Iglesia del gran país oriental, permitiendo a todos los obispos estar en plena comunión jerárquica con el Papa. La nueva firma estampada por las dos partes en el Acuerdo Provisional -que será válido a partir de hoy para los próximos cuatro años- sigue a la de la primera renovación por un periodo bienal que tuvo lugar en 2020 y a la de un segundo periodo bienal firmado exactamente el 22 de octubre de 2022…. El comunicado oficial que informa de la noticia explica la decisión, tomada «tras las oportunas consultas y evaluaciones», gracias al «consenso alcanzado para una fructífera aplicación» del Acuerdo sobre el nombramiento de obispos, y precisa que la «parte vaticana mantiene la intención de continuar el diálogo respetuoso y constructivo con la parte china, para el desarrollo de las relaciones bilaterales en vista del bien de la Iglesia católica en el país y de todo el pueblo chino».[9]

10. Implicaciones globales para la Iglesia Católica

El caso chino representa un laboratorio para la diplomacia vaticana frente a regímenes autoritarios. Sienta precedentes para cómo la Iglesia puede (o no) negociar su libertad y autoridad espiritual en contextos hostiles. La tensión entre realismo diplomático y fidelidad doctrinal permanece como un desafío abierto. Vale considerar el ejemplo de lo delicada de esta situación al recordar que, “Si bien en 2018 la Santa Sede y el gobierno de la República Popular China firmaron un acuerdo provisional sobre el nombramiento de obispos en el país asiático, las relaciones formales entre ambos Estados siguen siendo inexistentes. De hecho, el Vaticano es uno de los doce países en el mundo, y el único de Europa, que reconocen diplomáticamente a Taiwán. En 2024, se conmemoró el 88° aniversario de ese vínculo, que significa un respaldo para la isla en el contexto del creciente acoso por parte del régimen de Pekín. Tras el establecimiento de las relaciones diplomáticas en 1942, el Vaticano mantuvo inalterada su política exterior a pesar del triunfo de la revolución comunista. En los hechos, esa decisión significó el desconocimiento de la República Popular China, proclamada en 1949 tras el final de la guerra civil contra las fuerzas nacionalistas del general Chiang Kai-shek, quien estableció el gobierno de la “República de China” en la isla de Taiwán.[10]


[1] Asociación Patriótica Católica China. (2018, noviembre 19). BITTER WINTER (Español). https://es.bitterwinter.org/Glossary/asociacion-patriotica-catolica-china/

[2] (S/f). Fsspx.news. Recuperado el 4 de mayo de 2025, de https://fsspx.news/es/news/china-las-fuerzas-especiales-atacan-una-iglesia-no-registrada-52053

[3] Mares, C. (2025, mayo 1). China “elige” dos sacerdotes como obispos católicos tras la muerte del Papa Francisco. ACI Prensa. https://www.aciprensa.com/noticias/112911/china-elige-dos-sacerdotes-como-obispos-catolicos-tras-la-muerte-del-papa-francisco

[4] Cómo es la persecución a los cristianos en China. (s/f). Puertas Abiertas. Recuperado el 4 de mayo de 2025, de https://puertasabiertasal.org/persecucion-de-cristianos/lista-mundial/china

[5] López-Arias, C. (2024, octubre 3). El acuerdo secreto sobre obispos entre la Santa Sede y China: seis años de decepciones y desplantes. Religión en Libertad. https://www.religionenlibertad.com/vaticano/241003/parolin-se-dispone-prorrogar-acuerdo-china-decepciones-desplantes_92634.html

[6] El histórico acuerdo entre China y el Vaticano que algunos sacerdotes consideran una “traición”. (2018, septiembre 23). BBC. https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-45616338

[7] Xi Jinping y la sinización del marxismo. (2023, octubre 17). Observatorio de Política China [OPCh]. https://politica-china.org/areas/sistema-politico/xi-jinping-y-la-sinizacion-del-marxismo

[8] Divini Redemptoris (19 de marzo de 1937). (1937, marzo 19). Vatican.va. https://www.vatican.va/content/pius-xi/es/encyclicals/documents/hf_p-xi_enc_19370319_divini-redemptoris.html

[9] Vatican News. (2024, octubre 22). Santa Sede – China: Acuerdo Provisional prorrogado otros cuatro años. Vatican News. https://www.vaticannews.va/es/vaticano/news/2024-10/santa-sede-china-acuerdo-provisional-prorrogado-cuatro-annos.html

[10] Roca, M. (2025, abril 26). China y la diplomacia del Vaticano: por qué la Santa Sede tiene vínculos con Taipéi y no con Pekín. DEF Online. https://defonline.com.ar/internacionales/china-y-la-diplomacia-del-vaticano-por-que-la-santa-sede-tiene-vinculos-con-taiwan-y-no-con-pekin/

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